Detalles y regalos de boda cerca de mí
Demostrar a tus invitados que agradeces de corazón su apoyo, despidiéndoles con un detalle pensado especialmente para ellos, es de lo que van realmente los detalles de boda. Pueden ser comestibles, llamativos o muy prácticos, pero siempre deberían ser inolvidables. De lo contrario, corres el riesgo de que, después de la boda, terminen siendo regalos olvidados y sin uso…
Primer paso
Olvídate del estrés de organizar tu boda y ahorra un tiempo precioso con nuestras herramientas de planificación gratuitas. Este espacio de boda dedicado te ayudará a organizar y programar todo el evento de forma sencilla, ya sea por tu cuenta o trabajando mano a mano con tu wedding planner.
Segundo paso
Con los planes de boda ya definidos, ha llegado el momento de encontrar los proveedores que harán realidad todo lo que imaginas para vuestro gran día. Gracias a nuestra avanzada herramienta de búsqueda de proveedores y espacios, te pondremos en contacto con los mejores profesionales y te ayudaremos a crear el equipo de boda perfecto.
Salir de la boda de un amigo o de un familiar con un detalle en la mano hace que el recuerdo de la celebración dure un poco más. Ya sea un dulce que te comes en el taxi de vuelta a casa, o un pequeño adorno que colocas con cariño en una estantería, ese detalle de boda seguirá despertando alegría mucho después de que haya caído el último confeti.
Los detalles y regalos de boda pueden ser exactamente lo que tú quieras. Lo importante es que reflejen vuestra personalidad y el estilo de vuestra boda. Incluso pueden formar parte de la decoración del gran día. Los marcasitios, por ejemplo, son unos detalles de boda preciosos y, si son de buena calidad, acabarán siendo un bonito elemento decorativo en las casas de tus invitados.
En general, cuando valores un posible detalle de boda, intenta ponerte en el lugar de quien lo recibe. ¿Lo tirarías directamente a la basura? ¿O lo guardarías con cariño y agradecerías el gesto? Gastar dinero en detalles que sabes que no van a gustar es tirar el presupuesto por la ventana y no tiene ningún sentido.
Si contáis con un presupuesto de boda ajustado, plantéate preparar tú mismo/a los detalles de boda. Te sorprendería lo que se puede ahorrar. Los regalos comestibles, en particular, son fáciles de hacer en grandes cantidades y resultan muy económicos. Caramelos, galletas y bombones lucen de maravilla si se presentan con gusto. Además, puedes comprar tarros o cajitas al por mayor para colocarlos, y así ahorrar todavía más.
Eso sí, cuando se trate de detalles de boda comestibles, intenta no complicarte demasiado con los sabores. No añadas ingredientes extraños a tu chocolate negro ni des a los caramelos un toque salado raro. Es mejor apostar por sabores que gusten a la mayoría de los invitados, para que casi todo el mundo pueda disfrutarlos.
En los detalles comestibles hechos por ti, la presentación lo es todo: cuanto más cuidados estén, más los valorarán tus invitados. Al fin y al cabo, se come primero con la vista. Y, además, querrás que tus regalos encajen con el estilo de la boda, ya que probablemente los colocarás en un lugar destacado del banquete.
Más allá de los detalles de boda comestibles, hay muchos otros tipos de regalos que puedes hacer tú mismo/a y que, bien presentados, quedan igual de bonitos. Las velas, por ejemplo, son muy fáciles de crear desde cero y, además, son un detalle útil. Y cada vez que tus seres queridos enciendan esa vela, se acordarán de vosotros.
Además de los detalles para todos los invitados, conviene pensar en regalos especiales para vuestro séquito nupcial. Detalles pensados con cariño que demuestren cuánto valoráis su apoyo y todo el trabajo que han hecho durante la organización de la boda. No hace falta que sean caros, pero sí que tengan un significado especial.
Intenta no comprar el mismo regalo para cada miembro de tu séquito nupcial, porque así el detalle perderá parte de su encanto. Elige, crea o escribe algo único para cada persona, y así entenderán de verdad cuánto les aprecias.
Si el presupuesto lo permite y sientes que una propina no refleja lo increíbles que te han parecido ciertos proveedores, plantéate preparar algunos detalles de boda extra para ellos. Seguro que agradecen muchísimo recibir un pequeño regalo adicional, casi tanto como disfrutarán leyendo una buena reseña vuestra.
Una parte importante del protocolo de los detalles de boda es decidir cuándo se van a entregar. Si has dedicado muchas horas a que tus regalos queden preciosos y combinen a la perfección con la temática de la boda, probablemente te apetecerá colocarlos como punto focal en una mesa o integrarlos en cada puesto de mesa. Así sorprenderán a tus invitados al sentarse y, además, ofrecerán a tu fotógrafo una composición más que interesante que captar.