Regalos de boda cerca de mí

Demostrar a los invitados que se aprecia su apoyo, enviándoles de camino un obsequio bien pensado, es de lo que tratan los detalles de boda. Ya sean comestibles, extravagantes o prácticos, siempre deben ser memorables. De lo contrario, podrías acabar con unos cuantos regalos no deseados después de la boda...

Salir de la boda de un amigo o familiar con un regalo en la mano significa que el recuerdo de la celebración perdura un poco más. Ya sea un dulce que te comes en el taxi de camino a casa o un adorno cuidadosamente colocado en la estantería. Ese detalle de boda traerá alegría, mucho después de que haya caído el confeti.

Los detalles y regalos de boda pueden ser lo que tú quieras. Siempre que sean representativos de ti y de tu boda. Incluso pueden formar parte del estilismo del día de la boda. Los nombres de lugares, por ejemplo, son bonitos recuerdos de boda y, si son de calidad, se convertirán en un dulce elemento decorativo en las casas de tus invitados.

En general, cuando pienses en un determinado detalle de boda, piensa en cómo te sentirías si lo recibieras. ¿Lo tirarías inmediatamente a la basura? ¿O lo guardarías con cariño y te sentirías agradecido por el regalo? Gastar dinero y regalar obsequios que, con toda seguridad, no se querrán es una falsa economía y un derroche de presupuesto.

Si tu presupuesto para la boda es ajustado, considera la posibilidad de preparar tú misma los detalles. Te sorprenderá lo que puedes ahorrar. Los regalos comestibles, en particular, pueden hacerse fácilmente al por mayor y no cuestan casi nada. Los caramelos, las galletas y los bombones quedan muy bien presentados. Además, puedes comprar tarros o cajas al por mayor, con lo que también ahorrarás dinero.

Sin embargo, cuando se trate de recuerdos de boda comestibles, intenta no pasarte con los sabores. No añadas ingredientes raros y extravagantes al chocolate negro, ni des a los caramelos un extraño sabor salado. En lugar de eso, intenta atraer a la mayoría de los invitados, ofreciendo sabores que gusten a la mayoría.

La presentación es la clave de los recuerdos comestibles DIY, ya que cuanto más bonitos sean, más probabilidades habrá de que los invitados a la boda los aprecien. Al fin y al cabo, los ojos prueban antes que la boca. Además, querrás que tus regalos combinen bien con el tema de la boda. Es muy posible que se presenten en un lugar destacado del banquete.

Aparte de los recuerdos de boda comestibles, hay muchos otros tipos de regalos que puedes hacer tú mismo y que también quedan bien cuando se presentan de forma bonita. Las velas, por ejemplo, son muy fáciles de hacer desde cero y, en definitiva, son un regalo muy útil. Además, cada vez que tus seres queridos enciendan la vela, ¡pensarán en ti!

Más allá de los detalles de boda para los invitados, es bueno pensar en regalos especiales para los asistentes. Regalos que demuestren lo mucho que aprecias el apoyo y el duro trabajo que han realizado durante la organización de la boda. No tiene por qué ser caro, pero debe ser considerado.

Procura no comprar el mismo regalo para cada uno de los miembros de tu cortejo nupcial, ya que eso menoscabará lo especial que les parecerá el obsequio. Elige, crea o escribe algo único para la persona que lo reciba, y eso le ayudará a entender lo mucho que le aprecias.

Si tu presupuesto te lo permite y crees que una propina no demuestra lo increíbles que te parecen ciertos proveedores. Entonces considera la posibilidad de hacer recuerdos de boda extra para cada uno de tus proveedores. Seguro que apreciarán recibir algo un poco más, ¡casi tanto como recibir una buena crítica!

Una parte importante de la etiqueta de un detalle de boda es decidir cuándo debe presentarse. Para quienes han invertido muchas horas en hacer que sus regalos luzcan hermosos y coordinados sin esfuerzo con su tema. Probablemente querrás colocarlos en un punto focal de la mesa, o hacer que formen parte de cada cubierto. Así impresionarás a tus invitados cuando se sienten y darás a tu fotógrafo otra imagen interesante que captar.