Fincas y graneros para bodas cerca de mí

Las fincas y los graneros para bodas aportan un ambiente rústico maravilloso al día de la boda, lo que los convierte en la opción ideal para parejas que buscan un toque boho chic. Además, estos enclaves rurales y desenfadados suelen ser amplios y contar con abundantes espacios al aire libre.

Elegir el escenario perfecto para vuestro gran día puede ser todo un reto. Ilusionante, sí, pero un reto al fin y al cabo. Hoy en día es facilísimo ver cientos de lugares para bodas cerca de ti y filtrarlos según servicios y características. Pero esa facilidad para descubrir espacios no siempre hace más sencillo tomar la decisión final. El lugar perfecto para dar el “sí, quiero” tiene que ofrecer todo lo que necesitáis y, además, tener el aspecto que deseáis.

Si la estética de boda con la que sueñas es rústica, con encanto y llena de historia, podemos ayudarte en tu búsqueda. Las fincas y los graneros para bodas ofrecen personalidad, carácter y permiten que las parejas den a su celebración un aire único, sin esfuerzo. Y todo ello envuelto en ese estilo campestre relajado.

Celebrar vuestra boda en una finca o en un granero os brinda una sensación de intimidad que difícilmente puede ofrecer una ciudad o incluso un club social. Normalmente están algo apartados, lejos del bullicio y rodeados solo de naturaleza. Eso aporta a este tipo de espacios una exclusividad y una sensación de desconexión que encantará a vuestros invitados y les ayudará a relajarse y disfrutar de vuestro gran día.

Y no solo se relajarán vuestros invitados, también vosotros, con la tranquilidad de saber que no os cruzaréis con otra novia en los baños ni tendréis que preocuparos de nada que no sean vuestros seres más queridos.

Al rodearos de tanto verde y de un entorno tan bonito, también os aseguraréis un álbum de fotos lleno de fondos espectaculares. Colinas suaves, vistas infinitas al campo y la propia finca o granero de la boda pueden convertirse en protagonistas de vuestros retratos, aportando perspectivas realmente impresionantes. Ideal para quienes desean un reportaje fotográfico que deje boquiabiertos a sus seres queridos.

Contar con mucho espacio exterior es perfecto para parejas con una lista de invitados amplia. Incluso los graneros más pequeños suelen estar rodeados de zonas verdes. Esto significa que, si el tiempo acompaña, la ceremonia y el banquete pueden celebrarse al aire libre o bajo carpa.

Las parejas creativas también disfrutarán de la libertad decorativa que ofrecen las fincas y los graneros para bodas. Por lo general, en este tipo de espacios casi todo se puede personalizar: desde las sillas y la disposición de las mesas que imagináis, hasta la iluminación y el estilo general del lugar. Ideal si queréis que la ceremonia y el banquete reflejen al máximo vuestra personalidad.

El código de vestimenta también es clave para que vuestra boda se sienta fiel a quienes sois. A muchas parejas les encanta la idea de vestir de etiqueta o muy formal en su gran día. Pero si preferís un ambiente más relajado, un granero es el escenario perfecto para este estilo. Imaginad cuadros, trajes de colores y vestidos con estampados.

En línea con un vestuario más informal, el menú en una boda en finca o granero también puede ser más desenfadado. Platos de comida reconfortante, barbacoas y propuestas que gustan a todo el mundo funcionan de maravilla en este tipo de espacios, especialmente si se sirven al centro en mesas largas o en formato buffet al aire libre.

Entre bocado y bocado, vuestros invitados agradecerán un poco de entretenimiento para soltarse y relacionarse entre ellos. La mayoría de fincas y graneros cuentan con amplias zonas exteriores, perfectas para instalar juegos, atracciones de feria o incluso pequeños escenarios. Imaginad lo bien que se lo pasarán saltando de un juego a otro hasta acabar en la pista de baile al aire libre, disfrutando de la música de vuestro grupo en directo.

Combinar espacios interiores y exteriores es una de las grandes ventajas de las fincas y graneros para bodas. Tradicionalmente, este tipo de construcciones cuenta con grandes portones que se pueden abrir por completo, creando un lateral totalmente abierto y permitiendo que los invitados se muevan con libertad entre un ambiente y otro. Así podrán entrar a por una bebida o un plato de comida y volver a salir a disfrutar del sol y del aire del campo.