Museos y galerías para bodas cerca de mí

Muestra vuestra personalidad y ofrece a tus invitados una experiencia diferente celebrando tu boda en un museo o en una galería. Estos espacios únicos elevarán vuestra celebración sin esfuerzo y darán a vuestro gran día un aire sofisticado y elegante, sin necesidad de recargar el lugar con demasiada decoración.

Si acabáis de comprometeros, seguramente ahora miráis cada edificio que visitáis con otros ojos. ¿Podría esta estación de tren servir como espacio para la boda? ¿Y si nos casamos al fondo de este restaurante? Pero, ¿has pensado en un museo o en una galería de arte como posible lugar para celebrar tu boda?

Los museos y las galerías están diseñados precisamente para resultar visualmente atractivos e interesantes. ¿Qué mejor telón de fondo para el día de tu boda? Su singularidad despertará la curiosidad y su arquitectura aportará ese efecto impactante que llevas tiempo buscando.

Piensa en todas esas veces que has entrado en una galería o en un museo y el espacio te ha dejado sin aliento. Ya sea por las dimensiones de la sala o por la belleza de su interior, este tipo de lugares tiene la capacidad de emocionar. Ahora imagina celebrar tu boda en uno de esos espacios tan impresionantes.

El carácter tan escenográfico de museos y galerías es una gran ventaja cuando piensas en la decoración. Un aspecto de la organización de la boda que suele implicar un gasto importante, pero que puede reducirse considerablemente si el espacio ya está bien diseñado e iluminado. No hace falta empezar desde cero en este tipo de lugares, porque las obras de arte o las piezas del museo te marcarán fácilmente el camino hacia una paleta de colores.

El tipo de arte expuesto, o el museo que elijáis, incluso puede reflejar aspectos de vuestra relación y de vuestras pasiones. Por ejemplo, los amantes del motor pueden celebrar su boda rodeados de coches clásicos. Las parejas que se conocieron en un viaje a Italia podrían casarse en un museo de arte romano. Hay muchísimas maneras de conectar vuestra historia y vuestro amor con este tipo de espacio.

Integrar vuestra historia en el tema de la boda resulta mucho más sencillo cuando la celebras en un museo o en una galería de arte. Y, además, cualquiera de los dos creará fondos increíbles para vuestras fotografías. Las paredes y las exposiciones de una galería cambian constantemente, lo que significa que el escenario de vuestra boda probablemente no se repetirá nunca. Una exclusividad que todas las parejas desean.

Mientras tú y vuestro fotógrafo encontráis los mejores rincones para los retratos, vuestros invitados estarán entretenidos de una forma que un espacio convencional difícilmente puede ofrecer. Podrán recorrer el lugar a su ritmo o disfrutar de una visita guiada. Vivirán una experiencia exclusiva, muy distinta a la de un visitante habitual. Y sin coste adicional.

Es muy probable que vuestros seres queridos también agradezcan la ubicación del lugar de celebración, ya que las galerías y los museos suelen estar en zonas céntricas, cerca de alojamientos y otros puntos de interés. Así, quienes vienen de fuera, e incluso los invitados locales, pueden regalarse una pequeña escapada aprovechando vuestra boda, sin complicarse buscando transporte de ida y vuelta a un sitio apartado.

En general, el tamaño del grupo de invitados tampoco suele ser un problema cuando se celebra la boda en una galería o en un museo. Este tipo de espacios suele contar con varias salas, o con zonas modulables, capaces de adaptarse casi a cualquier número de personas. De este modo, tanto las bodas íntimas como las celebraciones más numerosas pueden organizarse sin dificultad.

Las galerías de arte y los museos suelen ser muy versátiles en cuanto a decoración. Es decir, si quieres transformar el espacio que te han asignado en el escenario de tus sueños, puedes hacerlo. Alquileres especiales, estructuras, montajes florales… cualquier elemento que sientas que encaja con vuestra boda puede incorporarse.

Además de esa flexibilidad decorativa, las galerías de arte suelen tener plantas diáfanas que facilitan la creación de distintas zonas con personalidad propia. Rincones de estar, un espacio para el cóctel y otro para el baile pueden diseñarse por separado y dotarse de un estilo único, ya sea siguiendo una línea coherente en todas las áreas o con una estética distinta para cada ambiente.

Este tipo de espacios menos tradicionales para bodas suele ofrecer más libertad a la hora de elegir a tus propios proveedores, algo que multiplica la creatividad durante la planificación. Poder contar con tu propio catering, coctelería y equipo de diseño ayuda muchísimo a que el día se sienta realmente vuestro. Además, puede suponer un ahorro en el presupuesto global, al mismo tiempo que conseguís exactamente lo que deseáis.